En los rincones más escondidos del Pirineo aragonés florece, una vez al año, una planta tan bella como rara: el Zapatito de dama (Cypripedium calceolus), una de las orquídeas más singulares de Europa.

Una orquídea con forma de zapatilla

El nombre común de “zapatito de dama” o “zapatilla de dama” se aplica a varias especies de orquídeas que comparten una característica muy llamativa: la forma de sus flores recuerda a una pequeña zapatilla, gracias a su labelo inflado.

Este tipo de orquídea silvestre pertenece a un grupo de géneros afines, como Cypripedium en América del Norte, Paphiopedilum en Asia tropical o Phragmipedium en Sudamérica. Pero la especie que crece en el Pirineo aragonés es única: el Cypripedium calceolus, un auténtico tesoro natural europeo.

En peligro de extinción, también en Aragón

El Zapatito de dama está protegido en toda Europa, y en Aragón se encuentra catalogado como “en peligro de extinción”, ya que solo se conserva en tres localidades pirenaicas.

Una de las más importantes está en el valle de Tena, entre Sallent de Gállego y Formigal, donde florece cada primavera durante apenas un mes. Su población, aunque notable, sigue siendo vulnerable.

Una flor difícil y muy codiciada

Esta orquídea silvestre es fascinante no solo por su forma y colorido, sino también por su complejo ciclo vital: tarda entre 8 y 10 años en dar su primera flor desde que la semilla cae al suelo. Y para germinar, necesita un tipo muy específico de hongo del que depende para sobrevivir en sus primeras etapas.

Durante mucho tiempo, su belleza la convirtió en objetivo de coleccionistas y aficionados que la arrancaban, incluso con raíz, poniendo en riesgo su supervivencia. A esto se suman otras amenazas actuales, como el cambio climático, la pérdida de hábitat y el impacto del turismo.

Vigilancia y educación ambiental

La población del valle de Tena fue descubierta en los años 80 por un botánico francés, que avistó las primeras plantas desde el autobús en el que viajaba. Desde el año 2000, esta zona está bajo vigilancia del Gobierno de Aragón, y cuenta con un Plan de Recuperación específico para garantizar su conservación.

Durante la floración, el colectivo Foratata se encarga de informar, vigilar y concienciar a los visitantes sobre la importancia de no pisar la zona y respetar el entorno. Como explica Elisa Andrés Gil, educadora ambiental del colectivo:

“Es una especie muy valorada y durante años mucha gente se la llevaba. Pero ahora se ha convertido en una oportunidad para sensibilizar y educar a quienes vienen a disfrutar de este espectáculo natural.”

Una joya de primavera en el corazón del Pirineo

La floración del Zapatito de dama ya ha comenzado. Este breve y delicado espectáculo se repite cada año durante unas pocas semanas en primavera. Para quienes se acerquen a Formigal o Sallent de Gállego en estas fechas, es una oportunidad única para contemplar una de las especies más valiosas de nuestra flora pirenaica.

Desde Inmobiliaria Canal Roya, comprometidos con el conocimiento y la protección del patrimonio natural de nuestro entorno, te invitamos a disfrutar de este fenómeno con respeto y admiración.